El mundillo de las webs está lleno de nombres extraños. Diseñadore, desarrolladores, webmaster, software, usabilidad,… Sin embargo, no es tan complicado entender las responsabilidades que deben asumir con respecto a la empresa. Hoy por hoy, internet es una magnífica herramienta empresarial. Una buena llegada a los usuarios finales es fundamental para la imagen que de la empresa tengan los clientes, tanto los actuales como los potenciales. Para ello, lo mejor es dedicar presupuesto y trabajo a la creación de sites con grandes dosis de usabilidad y navegabilidad.
Para la creación de una interfaz práctica para el usuario, el profesional del desarrollo debe trabajar con los diseñadores y los webmaster. Los primeros se encargan del funcionamiento del software, que debe combinarse con el aspecto final de la página. Esta tarea de incremento del atractivo la lleva el diseñador, quedando la comunión de todos los elementos, funcionales y de diseño, para el desarrollador. Sitios como Wikipedia han sido creadas por profesionales del desarrollo web.
En todo este proceso siempre hay espacio para la creatividad, que no tiene por qué estar reñida con la eficacia de la web. Existen direcciones que se presentan como una delicia creativa. Un buen ejemplo de ello lo podemos ver en la dirección de Apple Inc.. Diseños limpios, minimalistas, con figuras, fotografías y textos con tirón, son de las más premiadas por los navegantes. De hecho, no es muy complicado ver la diferencia con ese tipo de páginas sin organización, repletas de trastos inútiles, publicidad poco fiable y diseño hortera.
Para realizar todo este trabajo de búsqueda del atractivo, los webmaster deben manejar ciertas herramientas, como los lenguajes de programación ASP.NET, PHP y JSP y las diferentes bases de datos. Estos conocimientos, aunados con los de los diferentes profesionales de la rama, dan como resultado una interfaz con poder de seducción sobre el potencial cliente. Un ejercicio indispensable para las empresas del siglo XXI.
